martes, 22 de abril de 2014

Nos quedamos sin estreno de las costaleras de la cuadrilla de Loreto

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Veinticuatro angelitos sollozaban el domingo por la mañana debajo del manto de su madre la Señora del Loreto.

Sus corazones costaleros arrogantes y seguros de si mismos sobre el asfalto, se tornaban frágiles y delicados cuando la noticia llegó de la voz del Hermano Mayor. La lluvia incesante había frustrado el lucimiento de ese palio que radiaba una belleza distinta este año.

Nosotros bajo El Señor de la Resurrección, mirábamos con pena los respiraderos del paso de María. Quizá más compungidos por vuestra propia desilusión, que por nuestro pesar propio. se os oía llorar en todo el templo.

Ahora es cuando debéis recordar ese secreto que quedó entre vosotras y yo. Era solamente un día corazones. La gloria ya había sido vuestra antes de llegar ese Domingo de Resurrección cargado de agua que frustró nuestro paseo triunfal. Ya sabíais lo que era levantar expectación, y ya contabais con la mirada de esa Virgen jovencita que os acogía con cariño y se iba a dejar pasear por vosotras.

Estoy seguro de que el próximo año volveréis a recogerla siendo más, mejores, y más orgullosas de vuestro propio trabajo. Confiad 100% en vuestras posibilidades porque esa tribuna será un auténtico campanazo.


Ahora que todo se está tranquilizando un poco os voy a dejar otro secretito para la próxima vez: Cuando sonó vuestro llamador, todos nosotros estábamos pegados a nuestros respiraderos para veros, atentos a vosotras. Personalmente me tocó la posición más alejada en el costero izquierdo, así que opté directamente por salirme del paso (que no se enteren nuestros capataces) para disfrutar de vosotras. Se nos caía la baba niñas. El año que viene queremos más y mejor.


Nos vemos muy muy pronto.

Vuestro ferviente admirador





Texto: @JoseRuizB
Vídeo: @VideoRonda
Fotos: Jose María Bravo

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