El Lunes Santo se pudo disfrutar bastante. Y la anécdota de esta jornada es esta vez muy positiva. El Rey del Barrio León dio un espectáculo digno de ver en su visita a su hermandad madrina: La Estrella.
En su despedida, la cuadrilla siguió presentando sus respetos aún cuando Garduño pedía marcharse. Un pequeño pulso de la voluntad de los hombres contra la autoridad.